Ante la ausencia de recursos especializados en la provincia de Granada destinados al tratamiento específico de las personas con Daño Cerebral Adquirido, AGREDACE inicia en 2007 la gestión de la construcción de un Centro de Rehabilitación del Daño Cerebral Adquirido. Se consiguió hacer realidad la creación de un recurso, de carácter no privado, en nuestra provincia destinado a la atención específica y la rehabilitación integral e intensiva de este colectivo tras su alta hospitalaria.
La actuación del fisioterapeuta va encaminada a la restauración de las funciones del sistema motor que se han visto alteradas, la prevención de las posibles complicaciones derivadas del daño y de las incapacidades secundarias a él, y el mantenimiento de niveles óptimos de la función motora.
El logopeda evalúa, interviene y da pautas de manejo de los trastornos asociados a la comunicación, habla voz y deglución. Sus funciones incluyen el entrenamiento de las funciones deglutorias, la evaluación de las habilidades comunicativas del paciente, el diseño y puesta en marcha de un programa de intervención para mejorar dichas habilidades y, cuando no sea posible tal mejora, la instauración de sistemas alternativos o aumentativos de comunicación..
El neuropsicólogo, es un psicólogo especializado en el estudio de las relaciones cerebro-conducta, se encarga de valorar las dificultades cognitivas (atención, memoria, organización, razonamiento, funciones visuoperceptivas, etc.) emocionales y conductuales (desinhibición, apatía, etc.) de los usuarios y diseña e implementa el plan de intervención más adecuado. Además, interviene en dificultades emocionales que puede presentar el usuario (duelo, depresión, estados de ansiedad) para favorecer la mejor adaptación al centro y a su discapacidad. Así mismo, diseña e implementa el programa de atención a familias, organizando charlas formativas y psicoeducativas, que sirven como orientación en el proceso de cambio que tiene que afrontar la familia.
El Terapeuta Ocupacional evalúa el estado funcional y dirige su intervención a ayudar al usuario a conseguir su máxima independencia funcional tanto en actividades básicas (vestido, aseo, etc) como en actividades instrumentales (salidas al exterior, uso de transporte, manejo de dinero). Con este fin entrenan habilidades físicas y cognitivas de una manera eminentemente práctica e integrada, basando su intervención en el entrenamiento de actividades y tareas que permitan la máxima independencia de la persona en actividades cotidianas.
Asesora a las familias en la preparación del proceso de vuelta a casa. Informa y asesora sobre los trámites necesarios para optar a recursos sociales disponibles. Informa sobre los procedimientos para la solicitud de subvenciones, ayudas, prestaciones, incapacidad laboral, grado de discapacidad, etc.
Además diseña itinerarios de intervención para aquellas familias que necesiten apoyo psicosocial durante cualquiera de las fases del DCA.